Tanto el mayordomo Ambrosio como Isabel Preysler, nos dejaron claro que los Ferrero Rocher eran símbolo de un lujo delicado . Y que si no ofrecíamos a nuestros invitados uno de estos pequeños bomboncitos , nuestra fiesta de Navidad no sería lo mismo. Madre mía la influencia de la televisión....
Pero la verdad sea dicha, los Ferrero Rocher están de vicio¡¡¡, como las pipas vámos¡¡.
No os voy a mentir, la receta pringa bastante, pero como váis a disfrutar chupando los dedos uno a uno para quitaros la Nutella de encima, eso si , si vuestros hij@s no os la quitan antes¡¡¡
INGREDIENTES ( para unas 20-25 unidades........cuidadito de no hacer unos bolones tremendos....O SI¡¡)
500g de Nutella / avellanas tostadas sin piel / galletas para helado / 2 tabletas de chocolate con leche
ELABORACION
Ponemos la Nutella en la nevera durante todo 1 día-
Al día siguiente vamos cogiendo porciones con una cuchara , colocamos una avellana en el centro y ponemos otra porción de nutella encima y le damos forma de bola. A ver, por muy fría que esté la nutella va a acabar deshaciéndose, así que mi consejo es que no os preocupéis.......pringaros las manos y a disfrutar¡¡¡
Una vez tengáis todas las bolitas hechas, las metéis en la nevera hasta que endurezcan, no tardará mucho, media horita o una como mucho.
Mientras , machacáis las galletas, con medio paquete tendréis suficiente. Dejar algunos trocitos más grandes.
Sacáis las bolitas de la nevera y las rebozáis muy bien en las galletas. Como estarán duritas, apretar bien y así al mismo tiempo podréis dar mejor la forma de bolita. Cuando tengáis todas, volver a meter en la nevera durante un ratito.
Trocear con un cuchillo unos 125g de las avellanas. Fundir el chocolate al baño maría o en el microondas y mezclar las avellanas en él. Os quedará una masa ligeramente compacta pero en la que podréis ir bañando las bolitas de nutella de una en una. Una vez bien rebozadas, las dejáis en la nevera de un día para otro.
Avellanas troceadas a cuchillo
COMENTARIOS
- Pues que simplemente están de lujo¡¡
- Yo los he envuelto en papel dorado comprado en tiendas de repostería para darles una imagen más parecida a los originales. También los he puesto en cápsulas marrones.
